sábado, 27 de marzo de 2010

Los partidos aprueban las obras de recuperación del conjunto histórico de Arnao


Todos los partidos aprueban las obras de recuperación del conjunto histórico de Arnao, que podrá visitarse en julio del próximo año y abrirá al público cien metros de galería
La cuenta atrás de la recuperación de la mina de Arnao ya está en marcha. El Pleno de la Corporación castrillonense aprobó ayer por la tarde el proyecto definitivo que se había presentado por la mañana, lo que permitirá iniciar las obras después de Semana Santa como estaba previsto. Los tres grupos políticos municipales IU, PSOE y PP apoyaron con sus votos la ejecución de uno de los proyectos más ambiciosos del concejo.

La filosofía del proyecto la dejó clara el arquitecto redactor del mismo, Roberto Alonso, en la presentación de las obras en la que participó también el ingeniero de Minas, Iván Fanjul, de la empresa Sadim, del grupo Hunosa, que participará en la rehabilitación de las galerías mineras. «Se trata de quitar más que poner y de restaurar para permitir la percepción histórica del conjunto eliminando elementos que la distorsionan».

Las obras de rehabilitación del castillete y la recuperación de cien metros de galerías de la mina concluirán en poco más de un año. La alcaldesa de Castrillón, Ángela Vallina, aseguró que en el mes de julio de 2011 se pondrán en marcha las visitas turísticas al conjunto histórico industrial de Arnao. El acceso a la mina se realizará por un ascensor acristalado que recorrerá la caña del pozo en sustitución de las tradicionales jaulas.

La recuperación del castillete incluirá la eliminación de la fachada norte, una ampliación realizada al edificio primitivo en los años ochenta del siglo XX. La intervención permitirá mejorar las vistas de la playa de Arnao y del propio castillete. Asimismo, se eliminarán los falsos techos, añadidos en épocas recientes y se recuperará la estructura original, según explicó Roberto Alonso.

Las obras afectarán a unos 1.178 metros cuadrados construidos (951 metros cuadrados útiles), además hay que sumar la urbanización de las zonas verdes y aledaños del castillete que suman una superficie de algo más de una hectárea. La inversión prevista hasta finales del año 2011 es de cinco millones de euros de los que la Unión Europea a través de los fondos FEDER aporta 3,5 millones y el resto el Ayuntamiento de Castrillón.

El pozo de la mina de Arnao, es el primer pozo vertical de Asturias. «Una pieza única y de especiales características», dijo Iván Fanjul. El proyecto abarca la recuperación de 100 metros de galerías que contará con un plano inclinado de 28 grados de pendiente que formaba parte del antiguo circuito de ventilación y que se encuentran por encima del nivel de la playa. Se respetará en el mayor grado posible el estado original de la mina tal y como se conserva desde su cierre hace 95 años.

El descenso a la galería en el ascensor acristalado en un recorrido de unos 19 metros, permitirá a los visitantes apreciar el estado original de la caña del pozo compuesto por fábrica de ladrillo macizo y piezas de madera y metálicas que se utilizaban para guiar las jaulas en su recorrido de subida y bajada a la mina. La intervención en las galerías permitirá mantener el ladrillo macizo original y sólo están previsto refuerzos puntuales.

Asimismo, se recuperará la salida existente que comunica directamente con la playa de Arnao, así desde el interior de la mina los visitantes podrán ver el mar. En total habrá tres accesos: el de la caña del pozo, el de la playa y otro que se habilitará a la altura del actual campo de fútbol.

El campo de fútbol se eliminará, lo que permitirá recuperar una amplia zona verde que será un parque y un jardín expositivo con una sencilla red de itinerarios peatonales. En la zona verde se habilitarán pequeñas áreas de descanso con bancos e iluminación.

El recorrido turístico comenzará en el antiguo casino de la Real Compañía Asturiana de Minas (RCAM), que se reconvertirá en centro de interpretación y de recepción de visitas. Lo primero que verán los turistas una vez dentro es un vídeo explicativo, para lo que se habilitará una sala con capacidad para 50 personas. Después se realizará un recorrido expositivo por la historia del concejo que comenzará en el Devónico muy presente en el arrecife de fósiles de la playa de Arnao. Seguirá una explicación gráfica de la mina de carbón, las relaciones de la RCAM con Asturiana de Zinc (AZSA) y la influencia de ambas empresas en el tejido sociológico de Castrillón.

Después de recorrer la exposición, los visitantes llegarán al castillete y tomarán el ascensor para bajar por la caña del pozo a las galerías. Los turistas podrán acceder a las galerías con su propio calzado y con ropa de calle.

La locomotora «Eleonore» que están restaurando técnicos de Sadim en un taller de Langreo, se instalará en el jardín expositivo en el que también se colocarán otros elementos y piezas de exposición relacionadas con la actividad minera. «La locomotora la pondremos en los jardines en una zona donde vamos a instalar un tramo de vía. Dejarla dentro del castillete como estuvo estos últimos años restaría la visibilidad del mismo a los visitantes y tampoco se podría apreciar el valor de la máquina de tren construida en el siglo XIX», explicó Iván Fanjul.

Piedras Blancas,

I. MONTES

La alcaldesa de Castrillón, Ángela Vallina (IU), confía en que tanto el Principado como el Gobierno central se impliquen en el proyecto de recuperación de la mina de Arnao y su entorno. Vallina afirmó que los cinco millones de euros que se invertirán en este fase del proyecto provienen de la Unión Europea a través de los fondos FEDER y de las arcas municipales y deben completarse en el futuro con la implicación de otras administraciones. «Hay que aprovechar todas las posibilidades de este enclave único y que debe considerarse como el germen de la industrialización en Asturias y en España», concluyó.

El concejal de Hacienda y Patrimonio, Ramón Martínez Campo (PSOE) , dijo que la participación económica de las administraciones autonómica y central «es indispensable y además es una cuestión de justicia».

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