El Niemeyer sabe a chocolate y frambuesa
Una tienda de productos delicatessen de Avilés crea las «Niemeyitas», dulces que emulan con su forma el Centro Cultural
El Centro Cultural Internacional Oscar Niemeyer, que ya luce cúpula, ha tenido descendientes: «Niemeyitas». Con este nombre ha bautizado un comercio de productos delicatessen de Avilés su última creación: bombones elaborados a mano con diferentes chocolates que dejan sabor a frambuesa, limón, violeta, café y manzana. La idea nació casi al tiempo que el Ayuntamiento avilesino proyectaba un edificio de firma brasileña para la margen derecha de la ría. Felipe Díez, responsable del negocio, se puso entonces en contacto con el estudio Elastic, registró la marca y sacó a la venta 10.000 unidades de «Niemeyitas», que se vendieron como la pólvora y por docenas.
«Para nosotros fue bastante complicado crear un producto asociado al Centro Niemeyer, ya que cuando surgió la idea el proyecto aún estaba en bocetos», explicó Ángel Díaz, de Elastic. Añadió: «De ahí que nada más que se hizo público el primer esbozo arquitectónico, se ideó el dulce». Así nacieron las «Niemeyitas», unos dulces que imitan con su forma redondeada la cúpula del Centro Niemeyer y con el relleno, el agua y la Isla de la Innovación. Cada uno es de un color, y también tiene explicación. «Estamos haciendo alusión con un dulce a un centro cultural ligado a la diversidad y la creatividad», añadió el responsable de Elastic.
El proceso de elaboración de las «Niemeyitas» es artesanal: cada pieza se monta manualmente. Los productos, destacó Díaz, son igualmente naturales. «El proceso de industrialización casi no existe y los aromas son esencias naturales», dijo el responsable del estudio Elastic, quien destacó que la intención de la empresa Delicatessen Antonio es salir ahora con 50.000 unidades de «Niemeyitas», que venderán en cajas de cinco, diez y quince unidades. Asimismo, tienen en mente ampliar el surtido de chocolates y aromas. ¿El precio? «Muy competitivo», aseguró.
«Por ahora el producto resulta muy bien. De momento, la mayoría de los clientes es de Avilés, ya que hasta que el Centro Niemeyer no esté terminado, no podemos saber cuál va a ser su repercusión turística», explicó Díaz, quien ya se ha puesto en contacto con la dirección del Centro Cultural Internacional Oscar Niemeyer para posibles acuerdos con sabor a frambuesa. Y es que las «Niemeyitas» son el primer descendiente directo del edificio cultural, que ya luce cúpula blanca en la margen derecha de la ría. Antes, el pastelero avilesino Miguel Sierra ideó postres e incluso hubo quien propuso platos salados, casi todos con huevo, en homenaje al proyecto cultural del arquitecto Oscar Niemeyer.
Avilés se suma así a los diferentes municipios asturianos y españoles que han hecho de la gastronomía un filón ligado al turismo: «dulces de convento»; «Slab» de chocolate en homenaje a la siderurgia avilesina; «Letizias», en Ribadesella; «Pixuetinos», en Cudillero; «Carajitos del profesor», en Salas; «Cejas ZP», en Aguilar de Campoo (Palencia), y, ahora, las «Niemeyitas», de Avilés, demuestran que la cocina, pese a la crisis, vive su momento más dulce.
jueves, 12 de marzo de 2009
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Las niemeyitas no son mas que una imitación del dulce francés macaron. ¿Que se pensaban que somos tontos y no nos ibamos a dar cuenta?
ResponderEliminarQué triste que no puedan inventar nada nuevo y tengan que copiar lo de otros paises.
ResponderEliminarNo los he probado, pero de aspecto son iguales que los macarons franceses, pastelitos como sándwiches hechos de dos galletas finas y una crema o ganache entre ambas.
Encima suelen ser artesanales y en Francia los hacen en pequeñas confiterías y son buenísimos, aquí deben hacerlos en plan industrial con colorantes ... así que si cualquiera busca la receta por internet y pone un puesto en la calle, seguro que les da mil vueltas a las niemeyitas de marras
las habeis probado?? porq no tienen la textura de un macarons , y son rellenas.
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