El museo de Avilés tendrá un mirador con vistas a la iglesia de los Padres

El Museo de la Historia Urbana de Avilés, que se levanta en el solar anejo al nuevo convento de los franciscanos, tendrá un mirador con vistas a la iglesia de los Padres, de tal forma que la propia ciudad se incorporará de forma efectiva a los contenidos. Esta es una de las propuestas del proyecto de musealización que elabora la empresa Proasur, y que estará listo a finales del próximo mes. Los historiadores Juan Carlos y Vidal de la Madrid son los asesores de este trabajo, cuya aprobación definitiva quedará en manos del Ayuntamiento. El plazo límite para presentar el proyecto es el 31 de octubre, y a partir de ahí la empresa responsable de la construcción del museo, Proiecto, concluirá las obras, en función a las necesidades de los contenidos. La fecha de entrega fijada es abril de 2010.

Proasur, la responsable de la musealización, tiene amplia experiencia en este tipo de trabajos: desde su fundación en 1988 para equipar los contenidos del pabellón de Asturias en la Expo de Sevilla tiene entre sus clientes a la Fundación La Caixa, Sony, Eroski, Caja España, la Fundación Masaveu y Laboral Centro de Arte.

El museo de Avilés tiene aproximadamente 500 metros cuadrados de extensión, divididos en tres plantas. El acceso estará ubicado en la calle San Bernardo, y en la planta baja se ubicará la recepción, la tienda y la sala polivalente: será el punto de inicio y fin de la visita. Un ascensor llevará a los visitantes a la planta alta, donde comienza el recorrido. Los contenidos estarán ordenados por criterios cronológicos y en sentido descendente, de tal manera que la villa medieval, la ciudad de la época moderna, la ciudad burguesa y la ciudad industrial se sucederán en las plantas tercera, segunda y primera. Parte de los contenidos también «invadirán» la escalera.

En el Avilés medieval se destacarán aspectos como la muralla y la concesión del Fuero, mientras que en la edad moderna se hablará de dos incendios que marcaron la reconstrucción de la villa. En cuanto a la ciudad burguesa, contará la llegada de las nuevas industrias y del ferrocarril, mientras que la ciudad industrial se centrará principalmente en el establecimiento de Ensidesa.

Los redactores del proyecto proponen, por último, que los soportes de última generación convivirán junto a los tradicionales.